Mayo es el mes de la Concientización sobre la Salud Mental y lo estamos celebrando compartir actividades, información, historias y recursos para apoyar la salud mental y el bienestar de nuestros niños y nuestras familias. ¡Nuestra próxima actividad es excelente para hacer con los niños en casa, en la escuela o incluso afuera!
Crear mandalas con niños es una actividad creativa y meditativa que puede ayudar a los niños a relajarse, expresarse y ser conscientes de sus pensamientos y sentimientos. Debido a que crear mandalas requiere que se concentren en los detalles, ayuda a los niños a estar presentes en el momento. Esto también puede fomentar una sensación de calma y relajación. Los mandalas también brindan un espacio seguro para que los niños se expresen artísticamente sin la presión del juicio. Al elegir colores, formas y patrones, pueden comunicar sus emociones y pensamientos internos de una manera no verbal. Esta salida creativa les permite explorar y procesar sus sentimientos, desarrollando la autoconciencia.
Mandalas para la atención plena
Un mandala es un diseño circular que tiene colores, formas y patrones repetitivos que irradian desde el centro. El diseño del mandala no necesita permanecer dentro de las líneas ni verse de ninguna manera en particular. Los niños pueden usar el mandala para expresar lo que sienten y ponerlo en el mandala.
Aquí se explica cómo usar un mandala para la práctica de la atención plena y la meditación:
- Hay muchas maneras de crear un mandala. Puede dibujar un círculo en papel y crear patrones con diferentes formas y líneas, puede crear mandalas en 3D a partir de objetos encontrados dentro de su hogar o en la naturaleza, o puede encontrar e imprimir páginas para colorear de mandalas para Gratis en línea.
- Mientras los niños colorean o construyen su mandala, pídales que presten atención a sus pensamientos, sus sentimientos y su cuerpo. Si lo desea, también puede pedirles que establezcan una intención para su mandala. Por ejemplo, “este mandala es para hacerme sentir tranquilo” o “este mandala es para darme felicidad”.
- Mientras colorean, o una vez que hayan terminado, pregúntales qué estaban pensando y sintiendo mientras creaban su mandala.
- Los niños pueden quedarse con su mandala y colgarlo en algún lugar donde puedan verlo como un recordatorio positivo, o pueden soltarlo y soltarlo, si el mandala contiene emociones negativas.
Al participar en esta forma de arte meditativo, los niños pueden experimentar un efecto calmante, mejorar su concentración y atención y expresarse creativamente. Crear mandalas con niños es una manera maravillosa y fácil de fomentar la salud mental y el bienestar en el hogar. Te animamos a probar esta actividad, o una de nuestras otras actividades de salud mental, con su hijo este Mes de Concientización sobre la Salud Mental.